sábado, 27 de septiembre de 2008

Gotas de Oro Negro



El actual debate y asunto referente a la reforma energética en particular la petrolera es un asunto medular para la sociedad y el Estado mexicano. En definitiva no es un tema sencillo de abordar y mucho menos de discutir; el petróleo en esta nación juega un papel fundamental en la construcción moderna del país y en el ideario colectivo; es un fenómeno que tienen profundas implicaciones sociales. De igual modo el petróleo y PEMEX es un referente simbólico muy poderoso para los mexicanos, en especial aquellos que tienen cierta edad y madurez en sus juicios y sentimientos nacionales y sociales.

Para aquellos que son más jóvenes y menos versados en esta clase de temas parece ser un problema importante y un tanto incomodo, el imaginario colectivo con el que éstos han crecido es de una dimensión muy instrumental y pragmática, parece ser que es un problema que tiene una solución fácil y de algún modo el gobierno y “los que saben” se encargaran de ello.

Siempre he pensado, por lo menos desde que llegue a esta tierra, que si el escudo nacional mexicano tuviese que ser cambiado este tendría dos sustitutos perfectos que de igual modo son dos piezas fundamentales sin las cuales no se entendería a este país y los aquí viven. Dichos escudos nacionales podrían ser: como primer candidato -para hacer democrático dicho supuesto- estaría la virgen de Guadalupe, que representa al partido católico unido (PCU) por sus siglas en español, -jaja, me encantan esa clase de aclaraciones- no es novedad que unos de los llamados padres de la patria tomo el estandarte de la virgen como símbolo para independizarse de su captor político, religioso y económico español, no por nada los conglomerados de indios y gente que trabajaba la tierra se unieron al párroco para escribir una pagina importante de la historia en este país, que claro después esos mismos indios y gente del campo fueron desestimados y excluidos para darle su “justo” lugar a los criollos de buena cuna que los comandaron y después enloquecieron –pero hablar de estos excluidos es una historia undergrown, no tan heroica y llena de fantasía institucionalizada-. Entonces bien, la virgen puede ser un sustituto perfecto, pero a ella se le enfrenta el otro candidato, al cual llamaremos PETROLEO y representa al partido técnico-ideológico nacionalista (PTIN).

El petróleo es otro poderoso símbolo de la construcción de identidad nacional, es una de las joyas de la corona mexicana, que se posa al centro de la hermosa corona de plata con motivos en oro y piedras preciosas, pero en esa corona al centro, a la vista de todos esta el petróleo. El petróleo marca la consolidación del México unido, del México independiente y en vías de modernizarse. El petróleo es abanderado por el adalid de la patria, que logro expropiar dicho oro negro de las manos privadas; aquel que se logro quitar de encima a otros adalides que ya no brillaban por sus buenos deseos. De igual modo los indios y los que trabajaban el campo, sumados a aquellos conglomerados urbanos que fueron quitados de la historia, pues podían quitarle brillo al logro y a los que realmente “importan”, la clase hegemónica –siempre hay que recordarlo, así lo marcan los libros de texto gratuito y no tan gratuito-. El petróleo así se consagra como el impulsor y sostenedor de la vida nacional, como la sangre del país que desde hace muchas décadas surte las arcas del tesoro nacional y privado de su vital fetiche dinerario.

Pero como en la actual modernidad tardía lo importante es lo técnico y económico, siempre provisto de su importante inyección secular, tenemos que descartar a la virgen de Guadalupe, no es posible, somos una nación “racional” apegada al espíritu ilustrado de la revolución francesa y a la siempre importante doctrina liberal que da cohesión y lógica al imaginario social nacional. Además que a la iglesia no le gustaría que usáramos la imagen de la virgen, esta ya fue registrada y los derechos le pertenecen a ciertos personajes un tanto sombríos que ya explotan su imagen desde China hasta Estados Unidos y pues como el vulgo se relaciona tan bien con ella no sería posible darle una ideología dominante con facilidad, además que sus captores eclesiásticos ya le dieron una y están asociados con la clase fundamental de nuestro tiempo; lo cual la convierte en una opción simbólica difícil de controlar.

Entonces, nos queda el petróleo, que según las encuestas aventaja a la madrecita de todo México y además esta en boga actualmente, pero existe un problema al interior del partido. Resulta ser que la ala técnica esta invadida de un deseo fundamental que es permitir al capital continuar con su proceso “natural”, es decir, que dado el estado actual de la situación nacional PEMEX no opera racionalmente y su producción, dadas las estimaciones tecnológicas y presupuestarias con las que opera, indican que el vital liquido de color oscuro se agota o mejor enunciado, la extracción de dicho petróleo no resulta rentable –según las proyecciones institucionales-, lo cual pone en riesgo la estabilidad nacional y la lógica de acumulación capitalista para el Estado y las empresas privadas que trabajan con ellos. Entonces se hace necesario dotar a PEMEX de autonomía en sus más variadas dimensiones; además de permitir al capital internacional encarnado en corporaciones y empresas privadas auxilien la transformación de la paraestatal.

Por otro lado tenemos al grupo ideológico que representa la otra fracción del partido, el cual argumenta que el grupo técnico sólo quiere hacer negocio con el único patrimonio que queda de aquel Estado-subsidiador. Lo acusa de querer vender la joya de la corona a las empresas privadas –dicen por ahí que la figura máxima de este país, gano su elección con ayuda de varios “amigos-corporativos” nacionales y extranjeros y pues estos piden que él les ayude también ahora que lo necesitan- que buscan quitarle una cuantiosa porción de monopolio al Estado, bajo el discurso un tanto complejo, pero que finalmente promete que no será de ese modo.

Y así ha comenzado una batalla electoral de las distintas facciones políticas de este país con propaganda de todo tipo, los medios de comunicación ya tomaron a sus preferidos, los medios televisivos han optado en conjunto con la fracción técnica hacer absurdos comerciales donde con bolitas y palitos le hablan a la sociedad civil, en ocasiones me parece piensan que son imbéciles. La fracción ideológica ha optado por crear reacciones populares igualmente intensas y vistosas.

Lo irónico de todo este jueguito político y económico o de política económica como dirían mis profesores de economía, es que una vez más necesitan de la sociedad civil para vencer en esta batalla electoral. Si, la sociedad civil, esos indios y clase trabajadora que siempre borran de la historia importante, si, de esa chingona, de la parte donde le ponen letra de oro a los actores sociales destacados. Necesitan de ellos, pues finalmente y en letras no tan chiquitas son propietarios de esa misma riqueza petrolera. Podría esperarse que en esta ocasión a la sociedad civil no la borraran del librote histórico que se escribe a diario, pues ahora vivimos una democracia que reconoce a su ciudadanía como parte fundamental del la existencia del Estado; por fundamental me refiero a políticamente activa y en la cual sus necesidades y voz es tomada en cuenta, pues repito, vivimos una democracia, ¿no?

Hagamos una breve definición del Estado y le robare algunas ideas a una figura intelectual italiana de la cual omitiré su nombre, porque luego les da picazón a muchos intelectuales orgánicos el escuchar su nombre y como pretendo que esto sea leído por estudiantes dejemos cuestionen a sus profesores u opositores de la fracción técnica; así que mejor nos ahorramos el sin sabor y lo hago yo de este modo, espero sepan de quien se trata y dejemos que fluya el planteamiento.

El Estado esta compuesto por “sociedad civil” + “sociedad política”, ambos son expresiones de la sociedad civil pero para efectos prácticos y expositivos hay que diferenciarlos. En un mundo ideal y en una democracia real, la sociedad política debe estar sujeta a la sociedad civil y en particular a la clase hegemónica, sólo de este modo la democracia tendrá una expresión importante y como no habiendo otra ideología a la cual ajustarse, diría un buen numero de profesores e intelectuales, pues es necesario que la democracia sea una realidad y funcione como tal. Pero la experiencia en países no desarrollados como es el caso de muchas naciones latino americanas, el desarrollo de ambas sociedades no ha sido igual, la sociedad política se ha desarrollado mucho más rápido que la sociedad civil que es gelatinosa, entonces de ninguna manera la sociedad política esta sujeta a la sociedad civil y tampoco obedece a la voluntad general. Y más aun, en países en vías de desarrollarse, la pelea política se da en pos de conquistar el Estado, al aparato coercitivo y jurídico. Entonces la democracia, no puede funcionar como nos lo vienen platicando –todo esto sin añadir la otras dimensiones influyentes en esto-.

El problema que tienen ambas facciones es que dichos grupos políticos y partidos a final de cuentas actúan bajo una lógica consecuente con la toma del Estado, y su principal opositor hasta hace algunas pocas décadas era la figura presidencial y la alternancia del poder el objetivo. Entonces los problemas importantes de un corte menos político han sido desatendidos y sin duda son problemas medulares para la manutención del Estado mexicano.

Existen pues problemas fundamentales que atender y resolver, entre ellos el energético, pues es el dador de vida de las naciones modernas y desarrolladas. Pero se antoja difícil que con la simple lógica de políticas públicas, rational Choice, democracia representativa, social democracia y buenos deseos en el corto plazo se resuelvan las cosas. Más aun si se hace caso omiso de la sociedad, si, esos que para muchos de la fracción técnica son aquellos indios y campesinos que no entienden nada, y para la fracción ideológica parecen ser todo, salvo cuando se terminan los periodos electorales y no hay que acarrear gente.

No es gratuito pensar que tendremos serios problemas en un lapso de tiempo corto. Y por cierto, el escudo nacional me parece perfecto tal como esta.

Gracias por su tiempo.

INKEN DEAN.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, saludos!.
buen analisis, me gusto coincidi con el.